Otra vez no se a donde voy a llegar, esta es de esas que me pongo a escribir sin estructura ni objetivo.
Léelo solo si te aburres, que encima es larguito.
El tiempo.
Probablemente uno de los conceptos más confusos que se me ocurren.
- Es el dios al que yo le rezo.
- Es el recurso más desperdiciado en general y a la vez el más útil, finito y escaso. Diferenciador.
- Factor de equidad de todo ser humano en general.
- El único activo repartido de forma equitativa para cualquiera, los días duran lo mismo para todos.
Sencillo.
Es cierto que no todos tienen el mismo número de días ni la libertad para hacer con ellos lo que quieran.
También es cierto que no se puede comprar directamente.
De ahí lo de que el tiempo es el mismo mirado en un Casio o en un Rolex. No importa el dinero.
En eso estamos de acuerdo.
Aunque si que se puede vender.
Y el precio va a depender de lo que tú puedas producir en ese tiempo como beneficio para el que te lo compra.
De la demanda y oferta que exista de tu conjunto de habilidades.
Capitalismo al fin y al cabo.
Nadie va a comprar tus horas sin que le aportes más de lo que te pagan.
A no ser que seas funcionario. Lo cual deja ver el sin sentido de el status quo. Pero este no es el caso ahora.
Volviendo al rollo.
Tampoco te garantiza nadie que tu tiempo vayan a ser x años, igual mañana mueres y fin.
Lo único que tenemos garantizado es el final. Básicamente, la naturaleza efímera/temporal de todo, y cuando digo todo es todo.
(Tú, tu madre, el perro, tu pareja, tu casa, tu trabajo, un mechero, ...)
No hay segundas oportunidades. Se acaba y punto.
De hecho, habrá muchos que murieron ayer que tenían planes para hoy. Dándole más juego al asunto.
Por eso también creo que una de las principales fuente de dolor es el arrepentimiento de no haber hecho lo que creías conveniente con tu tiempo.
Cuando te das cuenta de que se te está acabando.
Y eso tampoco tiene solución.
Y déjame decirte que nunca vas a volver a ser tan joven como lo eres en este preciso instante.
Pesimista me puedes llamar. Así suena.
Por otro lado, bien es sabido que la elección de qué hacer con tu tiempo la tienes tú.
Por lo tanto no puedes culpar a otro de tus resultados pobres. Es fruto de tus elecciones previas.
Si priorizas la gratificación momentánea en sacrificio del largo plazo, se paga a 1 euro que no vas a conseguir nada que merezca realmente la pena.
Porque todo lo que merece la pena cuesta trabajo.
Realmente el que cueste trabajo es lo que lo hace bueno. Exclusivo o poco común.
Nadie quiere ser uno más, sin nada diferente que ofrecer en comparación con el resto de casi 8 mil millones de personas que somos.
Aunque en la comparación es donde el éxito muere.
Y aquí si que no hay discusión. Aunque la comparación tiende a ser inevitable.
Por regla general siempre va a haber alguien mejor que tú.
Más fuerte, más guapo, más técnico o más listo. No pasa nada.
Tienes otras circunstancias, aun así, un factor de diferenciación es el TIEMPO dedicado.
Además de dedicar ese tiempo de manera inteligente y eficiente claro está.
No vale solo con tirar las horas al pozo, hay que aprovecharlas.
Ya terminando.
Valiéndonos de un enfoque reduccionista, el tiempo es la raíz de todo.
El activo más valioso repito.
Importante decir que la gente valora tu tiempo según la importancia que tú le des.
Igual que te van a respetar según tú te respetes a ti mismo. Aunque aquí también hay otras historias, pero que sean para otro día.
Volviendo al tiempo.
Si que se puede comprar, pero indirectamente y en de forma muy limitada:
A) Con dinero: pagando para eliminar esperas, comprar el tiempo de otro, comprando mejores servicios o productos que nos ahorren tiempo.
B) Con conocimiento: buenos hábitos que nos hagan vivir más y con mejor salud o inteligencia que nos haga aprovechar mejor el tiempo que tenemos.
Poder se puede. De forma limitada.
Tienes que ser consciente de que se puede para poder aprovecharte de la posibilidad, claro está.
Aunque aprovechar el tiempo o querer estirarlo lo máximo posible es una elección muchas veces:
Etapas de mi vida estuvieron guiadas por el típico "vive rápido muere joven" o "vive rápido y ya se verá"
O gente que decide enfocarlo de maneras muy diversas, siendo inconformista, siendo hedonista, nihilista, ... o no siendo nada (el enfoque del sudapollismo).
"para el poco tiempo que tenemos habrá que hacer lo máximo que se puedas"
"Para el poco tiempo que tenemos habrá que disfrutarlo"
"Yo soy una hoja movida por el viento"
...
Cada uno lo afronta como le parece conveniente, no hay problema con eso.
Donde yo creo que está la clave es en vivir con coherencia a lo que creas y a donde quieras llegar.
Si cumples algo tan sencillo como eso (sencillo de decir no de hacer) yo creo que te puedes librar bastante bien de la angustia del paso del tiempo.
El tiempo va a pasar igual, pero por lo menos lo tendrás bien aprovechado.
Que ya es más de lo que puede decir la mayoría.
Con esto ya me despido, fue mucho hoy. Yo avisé, el que avisa no es traidor, a veces.
Gracias por leértelo si has llegado hasta aquí. One looove.
Te deseo un buen fin de semana.
Un fuerte abrazo.